Laura Prego, Técnica ZING Mentoría, Área de Empleabilidad

En los últimos años, ha surgido un creciente interés en España hacia la mentoría social como un recurso efectivo para respaldar a grupos en situaciones de vulnerabilidad. Diversos estudios respaldan los beneficios de esta metodología (DuBois & Rhodes, 2008), que se fundamenta en la creación de lazos de confianza entre personas mentoras y mentoradas, con repercusiones tanto a nivel individual como en la sociedad en su totalidad.

La meta de la mentoría dentro del proyecto ZING es estimular el crecimiento psicosocial y competencial de los jóvenes, en una etapa crucial de su desarrollo de identidad y autoestima. Los efectos positivos del respaldo de un mentor se manifiestan en distintos aspectos, desde el desarrollo de habilidades sociales hasta mejoras notables en el bienestar emocional y psicológico. Además, en líneas generales, se ha constatado como un factor determinante en la disminución de conductas de riesgo y en la promoción de logros académicos positivos (Feu y Prieto-Flores, 2015).

No obstante, el impacto de la mentoría no se restringe a las personas mentoradas. La relación bidireccional establecida también enriquece a los mentores, presentándose como una oportunidad de aprendizaje mutuo que contribuye a la eliminación de estereotipos y prejuicios asociados a grupos culturales, clases sociales o generaciones específicas (Agullo, 1997).

Al conectar con individuos provenientes de contextos diversos, los mentores asumen un compromiso profundo con la diversidad y se sumergen en un proceso continuo de aprendizaje. Este enriquecimiento personal les capacita para abogar por la justicia, respetar los derechos y la dignidad de las personas, convirtiendo así a la mentoría en un puente que fomenta la comprensión mutua y la empatía.

Se ha demostrado que la inversión en relaciones humanas es esencial para construir una sociedad más unida y comprensiva. Este enfoque capacita a las personas mentoradas para ser agentes activos de cambio en sus propias vidas y les proporciona las herramientas necesarias para establecer relaciones similares en su entorno natural.

De esta manera, la mentoría social, en su esencia, se erige como un motor de cambio social, desafiando las convenciones tradicionales en las políticas sociales y promoviendo relaciones basadas en el apoyo mutuo en lugar de jerarquías asistenciales.