Uno de los ejes más diferenciales de ZING Programme recae en ofrecer oportunidades formativas a jóvenes comprometidos con sus estudios, responsables pero sobre todo con una vocación clara. Y no sólo eso. Aspiramos a que la vocación académica se transforme en pocos años en una profesión vocacional. ¿Qué nos lleva a diferenciar esta apuesta como uno de los éxitos de ZING?

De la vocación académica a la vocación profesional

En primer lugar la necesidad de los jóvenes de encontrar un sentido a sus itinerarios formativos y laborales. Simon Sinek argumenta en el su teoría del “círculo dorado” que la gran mayoría de adultos van a sus trabajos sabiendo qué deben hacer cada día; buena parte de ellos podrían explicar cómo lo llevarán a cabo, pero muy pocos son capaces de explicar por qué lo hacen. Es decir, qué sentido tiene su contribución laboral. Este sesgo entre lo que nos motiva y mueve respecto a lo que acabamos llevando a cabo sale reflejado en las últimas investigaciones de mercado – sólo un 13% de los trabajadores afirman realizar un trabajo vocacional. Si la vocación es tan importante, ¿Cómo la definiríamos?

Para algunos es sinónimo de trabajo ideal. Para otros, el destino que nos viene marcado. Como si nuestra misión educativa o laboral fuera encontrar éste  trabajo concreto que impulsa nuestros talentos y para el cuál estábamos predestinados. Futbolista, astronauta, doctor/a o influencer. ¿Cierto? En parte. Desde ZING creemos que el descubrimiento vocacional es un proceso que contempla dos grandes etapas. En primer lugar, descubrir quién soy y para qué valgo (autoconocimiento). Y en segundo lugar, como impulsar mis talentos hacia una profesión que me motive (la orientación académica).

Pongámosle forma con un ejemplo concreto. Imaginemos un joven con talento para compartir historias; con facilidad para presentar y compartir relatos ante grupos de personas, y con dotes de buen orador. Este joven tiene la vocación de comunicador, y por delante no tiene un solo itinerario sino muchos según sus intereses personales:

  • Vocación comunicador + interés para deportes (periodista deportivo)
  • Vocación comunicador + interés para negocios (marketing)
  • Vocación comunicador + interés por el teatro (actor/actriz)

 

El proyecto ZING Vocación

La vocación no limita sino que potencia los itinerarios formativos de los jóvenes. ¿Y cómo lo trabajamos desde ZING?

ZING Vocación se dirige a jóvenes desmotivados y / o desorientados vinculados a Entidades Sociales con el objetivo de impulsar su descubrimiento vocacional y activar en el corto plazo itinerarios formativos o laborales. La implementación del programa se lleva a cabo a través de intervenciones individuales o grupales, con una metodología propia, y con un equipo de 20 sherpas (facilitadores profesionales) que acompañarán a los jóvenes hacia su cima – descubrir su futuro por qué.

Los resultados 6 meses finalizado el proyecto son muy satisfactorios con una activación del 90% de jóvenes participantes, es decir, que han vuelto al sistema educativo o conseguido una inserción laboral. Durante el último curso 2020/21 se han beneficiado de ZING Vocación 400 jóvenes.

¿Termina aquí el impacto del proyecto? Sabemos que no, y es que buena parte del 92% de éxito educativo de los 800 jóvenes que recibieron una Beca ZING el año pasado se debe a su motivación extraordinaria al cursar estudios vocacionales.

Y es que como decía Mark Twain, “los 2 días más importantes de tu vida son cuando naces, y cuando descubres por qué”. ¿Os apuntáis a la expedición? Todo camino empieza con un primer paso.